Cuando Lin Che entró en WeChat, incluso Gu Jingyu había enviado un mensaje que decía: —Manejaste bastante bien tus relaciones públicas. Parece que tu equipo no se infectó por tu baja inteligencia.
Lin Che escribió un mensaje con enojo en WeChat.
—Vete y muere. ¡No me llames estúpida!
Sin embargo, el hecho de que un gurú como Gu Jingyu aprobara la forma de manejar los asuntos de Yu Minmin demostró que Yu Minmin realmente no había hecho nada malo.
De ser atacada a burlarse de sí misma, Lin Che experimentó un cambio en este día de Navidad.
Gu Jingze solo vino a casa por la noche. Cuando vio que Lin Che parecía haber descansado bastante bien, le ordenó al aeropuerto que preparara un avión y una ruta. Quería que ella tomara un avión de la familia Gu con él y regresara a casa juntos.
