Snow Li tenía la cara llena de sonrisas. Aún era Wang Zheng, con su invencible pala.
—¿Eso... es posible?
De Fulei era incapaz de expresar sus emociones actuales, y su discurso era un desastre. Las habilidades físicas y la habilidad X de ese Takumi estaban al nivel de los mejores expertos, pero habían sido desguazadas en un montón de mierda inútil por una simple pala. No había visto IG, sino que acababa de escuchar a Snow Li, pero siempre había creído que los rumores eran exagerados. Pero ahora, ningún idioma era capaz de expresar su sorpresa. ¿Por qué un hombre así necesitaría alguna habilidad X? ¡Podría golpear a todo el mundo hasta la muerte!
Ai Xiaolu se lamió los labios.
—Mi querida Snow, ¿quieres considerar seriamente la propuesta?
Snow Li se sorprendió: —¿Qué?
—Tú serás la primera esposa, yo soy la amante, De Fulei bueno…
Después de terminar, Ai Xiaolu huyó inmediatamente, mientras que Snow Li y De Fulei la persiguieron.