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Chapter 31 - Capítulo 31 – Hombres Verdaderos

El joven rió ligeramente.

—Un estornudo de la Princesa de Aslan puede despedir a un representante. Ella es extremadamente poderosa. Muy bien, echemos un vistazo a lo que él quiere.

El mayordomo bajó la cabeza mientras decía: —Lo han usado como pretexto. Su hija también está aquí. Parece que...

Un indicio de burla apareció en la comisura de la boca del joven.

—¿Cuándo llegarán las Máquinas de Aslan?

—A lo sumo en una semana desde ahora. Como usted sabe, es un poco más problemático para ellos sacarlas de la Aduana.

—¡Dales otros tres días!

El joven no prestó demasiada atención.

—Entendido, tres días —dijo respetuosamente el mayordomo.

El día al que él se refería correspondía a un día en el tiempo de la Tierra. También se usaba para medir el tiempo en el Sistema Solar y finalmente se utilizó como la base del tiempo en la Vía Láctea.

En ese mismo mundo, en una región muy diferente un domingo por la mañana, cuatro personas se reunieron temprano en la mañana en una pintoresca tienda de té.

Mina del Té, una pequeña tienda especializada en té negro. El jefe era un individuo muy meticuloso y la Mina del Té tenía un diseño único basado en sus ideas. Era bastante conocido en la escuela.

Los cuatro individuos se sentaron.

—Ya que el líder de nuestro dormitorio no tiene solicitudes, ¡Yo iré primero! —dijo Zhang Shan.

—Basado en nuestro coeficiente intelectual, ya que soy él que posee el más elevado, ¡Elegiré primero!

Yao Ailun no quiso ser superado.

—¿No deberían dejarme tener la primera elección? ¡Debemos respetar a los viejos y cuidar de los jóvenes! —dijo Chen Xiu, con evidente molestia.

Los tres ya estaban conversando y Wang Zheng no sabía si reír o llorar. Parecía que el encanto de las mujeres hermosas realmente era poderoso.

En ese momento, una chica entró enérgicamente. Miró a su alrededor y luego se dirigió rápidamente hacia ellos.

Los cuatro quedaron impactados. ¿No me digas que ella era la elegida? ¿No debería serlo? ¡DIOS!

Cuando esa chica... más bien, cuando esa marimacha se sentó en la silla opuesta a los cuatro, ellos sintieron claramente un temblor.

—El resto no vendrá. Hemos acordado en permitir que me lleve a uno. ¡Ustedes, muchachos, decidan entre ustedes! —dijo ella, agarrando la tetera que estaba sobre la mesa y bebió directamente.

Los cuatro, quienes estaban bien vestidos, estaban petrificados y se miraron entre sí.

Yao Ailun levantó sus anteojos dorados y dijo seriamente: —Cof, cof. Zhang Shan, siento que sin importar cómo uno lo vea, ¡Eres el más adecuado!

Mediante examinación visual, su peso era de alrededor de 180 libras y ambas manos tenían callos. Era muy probable que fuese una practicante de artes marciales: Si le daba una sola bofetada, si no lo mataba, al menos le costaría la mitad de su vida.

Zhang Shan sonrió y se hizo notar repentinamente con un gesto afeminado con la mano.

—Oh, ¿es cierto? ¡Estoy tan feliz!

La cara de la marimacha se arrugó.

—¡Lárgate, mariquita!

Zhang Shan miró con aire de agravio, como si estuviera muy herido. Wang Zheng y el resto lo regañaron por ser un descarado.

—Puedo ayudar, pero primero tengo que decirle a mi mamá. Una vez que ella esté de acuerdo, entonces puedo darles una respuesta. ¿Pueden esperarme? —dijo Chen Xiu proactivamente.

La marimacha inmediatamente le rechazó.

—¡Lárgate! ¡Vuelve a casa con tu mamá!

El estudiante Chen Xiu sonrió con orgullo. La mirada de la niña se fijó en Wang Zheng y Yao Ailun.

Yao Ailun muy suavemente levantó sus gafas. Desde su forma de vestir hasta su temperamento, quedó claro que la marimacha estaba muy interesada en él.

—Un hombre debe ser un hombre de palabra. Ya que estoy de acuerdo, no tengo... ¡no, ah, ah, no! —la cara del estudiante Yao de repente se volvió color cenizas mientras temblaba, sacaba algo de su bolsillo y lo ponía en su boca, inhalando profundamente—. Ah, dame un ¡momento!

La marimacha estaba bastante decepcionada y solo quedaba Wang Zheng.

Los otros tres lo miraron inocentemente. Los ojos de Chen Xiu estaban llenos de adoración.

—Hermano Zheng, como jefe del dormitorio, ¡Tienes el deber de hacerlo!

—¡Eres el mejor en entrenamiento militar, te lo mereces!

Zhang Shan palmeó el hombro de Wang Zheng.

—El orgullo del Departamento de Física, solo tú puedes llevar esta pesada responsabilidad. ¡Nosotros, los hermanos, nunca olvidaremos tu sacrificio!

La comisura de la boca del estudiante Ailun llevaba una espléndida sonrisa.

—¡Oye! Tú eres ese Wang Zheng. ¡Este servirá, eres tú!

La marimacha de repente golpeó la mesa. Las personas al rededor inmediatamente la miraron.

—¿Qué estás mirando? ¡Te mataré a golpes si sigues mirando!

¡De aspecto robusto, feroz y asesino!

Aun cuando eso estaba cerca de la escuela militar, la gente a su alrededor estaba aterrorizada.

Wang Zheng se quejó silenciosamente en su corazón. ¿Qué estaba haciendo Ye Zisu? Pensando en cómo ella lo había ayudado tanto, se sintió un poco culpable por dejar que su amiga volviese sola de esa manera. De todos modos, tendría que lidiar con ella por un solo día; al menos así las cosas no serían tan embarazosas para ella.

—Si es únicamente por un día, puedo hacerlo.

La marimacha frunció el ceño.

—¿Qué quieres decir con un solo día? ¡Debes comprometerte durante al menos un mes!

Las tres personas junto a Wang Zheng intentaron reprimir su risa. Para "comprometerse" tan ferozmente, ¿Podría uno sobrevivir durante un mes?

La marimacha pareció darse cuenta de que algo no estaba bien.

—¿Qué piensan, chicos? ¿No es esto solo un modelo para el Club de Arte? ¡Ni siquiera tienen que desnudarse!

¿Club de Arte?

¿El legendario Club de Arte con un sinfín de muchachitas y bellezas de jade esculpidas?

¿Modelo?

Los cuatro quedaron estupefactos. En ese momento, Ye Zisu y tres chicas guapas entraron.

—Disculpen, nos encontramos con algo, así que llegamos tarde.

—Oh, Presidenta, ¿por qué está aquí? —preguntó una chica de pelo largo con un vestido azul.

—Qingqing, ¿no es él?

—Presidenta, dije en la tienda junto a la Mina del Té, no en la Mina del Té.

Qingqing se echó a reír.

—No importa, este tipo no se ve mal. El mejor estudiante militar de primer año, Wang Zheng, ¿verdad? ¡Te usaremos a ti! —dijo la marimacha mientras señalaba a Wang Zheng.

—Estudiante Wang Zheng, tendremos que molestarlo en el futuro. Soy la compañera de dormitorio de Zisu y también la vicepresidenta del Club de Arte, Du Qingqing. Esta es la presidenta de nuestro club, Zhang Runan.

Du Qingqing se echó a reír.

—Parece que estamos destinados a reunirnos.

—Está bien, todos pueden seguir conversando. ¡Me voy!

Se fue con pasos agigantados después de hablar. ¡Maldita sea, ella no era diferente de un verdadero macho alfa![i]

Con un incidente tan pequeño, todos podrían interactuar de forma más fácil y natural.

El estudiante Yao Ailun comenzó a actuar como un caballero lleno de elegancia en el momento en que aparecieron las cuatro bellezas. Aquel chico, Chen Xiu, también dejó de fingir ser un niño de mamá. Miró a su alrededor con ojos grandes y llorosos, sacando su encanto interior. Que chico más lindo, un hallazgo raro en la escuela militar.

Zhang Shan realmente quería poder quitarse inmediatamente la camisa y mostrar sus músculos. Nadie podía vencerlo cuando se trataba del físico.

Las cuatro compañeras de dormitorio de Ye Zisu eran Du Qingqing, Departamento de Oficiales, especializada en estrategia, vicepresidenta del Club de Arte.

An Mei, Departamento de Oficiales, especialista en administración, miembro del Club de Teatro.

La última fue una agregada inesperada. El dormitorio de Ye Zisu originalmente solo tenía tres personas. Ella originalmente no vivía en la escuela y fue transferida. Meng Tian del Departamento de Máquinas.

Wang Zheng y Zhang Shan, naturalmente, no estaban familiarizados con ella. Casi 1,8 metros de altura, cuerpo esbelto, fría como el hielo. Lo más importante, ella era bonita. En conjunto, definitivamente memorable.

—Tomen asiento, tomen asiento. ¡Conocer a cuatro grandes bellezas es un honor para mí! —el estudiante Ailun inmediatamente se hizo notar—. ¿Qué les gustaría pedir? Por favor, adelántense y ordenen, yo invito.

Maldita sea, ese chico ya había hecho su jugada. Chen Xiu inmediatamente se acercó y puso las sillas para ellas.

—Vaya, este muchachito guapo es muy educado.

An Mei rió. Su boca era muy grande con labios exquisitos. Con todo junto, ella se veía bastante sexy.

El estudiante Chen Xiu sonrió inocentemente.

—Estar al servicio de estas hermosas hermanas es un honor para mí.

El definitivamente parecía del tipo inofensivo.

Maldición. Ese año, los jóvenes eran muy maliciosos y atacaban muy rápidamente.

Zhang Shan y Wang Zheng pensaron en cómo actuar, pero se dieron cuenta de que ya no quedaba mucho por hacer.

—Parece que nuestra escuela ha asignado los dormitorios por apariencia — dijo Zhang Shan. A todas las chicas les gustaban los cumplidos, especialmente aquellas que eran excepcionales.

Incluso el bruto de Zhang Shan tenía un lado delicado.

—¡Wang Zheng, me gustaría tener una pequeña competencia contigo! —dijo Meng Tian de repente.

—Tiantian es del club de Artes Marciales Mixtas. ¡Oh, no nos desprecien chicas! —dijo Du Qingqing.

—Hoy estamos aquí para hacer amigos y hablar sobre nuestras pasiones románticas, ¿no? —dijo Ye Zisu, pasando por alto la electrizante mirada de Meng Tian.

—Al verlos a ustedes cuatro, finalmente comprendo por qué los antiguos acuñaron la frase 'un festín para los ojos'.

En este momento, el estudiante Yao no mostró rastro de su temperamento de otaku. Claramente, el parecía todo un veterano en el campo del amor. Su actuación era estelar.

Toda la tarde estuvo llena de charla y risas. El estudiante Wang Zheng ni siquiera pudo encontrar muchas oportunidades para hablar, mucho menos tener silencios incómodos. Las chicas también se sorprendieron, ya que originalmente esperaban que los chicos del Departamento de Física fuesen un poco extraños; ¿quién hubiese pensado que esos cuatro eran tan especiales?

Según lo normal, las partes intercambiaron números de Skylink. Eso demostró que la red fue exitosa y que existía la posibilidad de un nuevo encuentro.

Después de separarse, los cuatro caminaron por la escuela con los brazos alrededor de los hombros del otro.

—Wang Zheng, sobre el tema del Club de Arte, si no puedes hacerlo, nosotros, tus hermanos, también podemos ayudarte a compartir la carga.

—Sí, todos somos camaradas en las trincheras de la batalla. Deberíamos avanzar juntos contra viento y marea.

—Creo que pueden encontrar mucha inspiración de mi cuerpo —dijo el estudiante Chen Xiu, de forma extremadamente adorable.

Los tres lo miraron fijamente y mostraron sus dedos medios al mismo tiempo.

—¡Desvergonzado!

Wang Zheng no continuó participando en esta discusión sobre chicas. Fue llamado a retirarse por Xie Yuxin.

El Pequeño Yu todavía era considerado una persona "tímida". Usualmente, eran Wang Zheng y Yan Xiaosu quienes iban a buscarlo.

Cuando Wang Zheng llegó, Yan Xiaosu y Xie Yuxin ya se encontraban allí y parecían bastante solemnes.

—¿Qué pasa?

Yan Xiaosu hizo un puchero: —Pregúntale. Este tipo está siendo muy reservado, ni siquiera yo sé qué es lo qué le pasa.

Xie Yuxin sonrió y sacó una baraja de cartas.

—Cada uno escoja una carta al azar.

Los ojos de Yan Xiaosu se iluminaron.

—Ah, Pequeño Yu, no me digas que has aprendido magia. Si vas por ese camino, todo lo que tienes que hacer es mostrar un poco los dientes y todas las chicas irán contigo.

Xie Yuxin miró hacia Wang Zheng. Él eligió una carta al azar.

—Rey de Corazones.

Wang Zheng se sorprendió.

—De hecho, ¿Cómo lo has adivinado?

Yan Xiaosu tomó la baraja.

—Esto debe tener un truco. ¿Cómo puedes estar tan enfermo?

Yan Xiaosu eligió una carta al azar y al final, Xie Yuxin la adivinó.

Yan Xiaosu volvió a barajar las cartas e incluso eligió al azar una carta detrás de su espalda y le pidió a Xie Yuxin que cerrara los ojos y adivinase.

Eventualmente, lo adivinó todo correctamente.

Yan Xiaosu también sintió que algo estaba pasando. Mirando a Xie Yuxin con un par de ojos grandes, de repente se dio una palmada en el muslo.

—¡Mierda! ¡No me digas que debemos comprar boletos de lotería y, en el futuro, nos haremos ricos y dominaremos el universo!

Xie Yuxin se hartó y finalmente estalló y maldijo: —¡¿Acaso no puedes pensar en otra cosa?!

Yan Xiaosu se rio. Se sentía halagado.

—¡Los boletos son más prácticos!

—No puedo adivinar la lotería. Wang Zheng, creo que ya has tenido una idea.

Él asintió.

—¿Es ese el uno entre diez mil, Poder de élite, la Habilidad X?

—Mierda, comparado contigo, apesto. Ya eres guapo y ahora esto. ¡Serás inigualable para recoger polluelas!

Yan Xiaosu estaba bastante deprimido.

El mundo de Yan Xiaosu era todo sobre chicas o la lotería y los dos no podían hacer nada al respecto.

—¿A ustedes no les resulta extraño cómo nos hicimos amigos?

Xie Yuxin rió.

Yan Xiaosu se tocó la nariz, algo que aprendió de Wang Zheng.

—Cof, cof, más bien estuvimos dispuestos a adoptarte.

[i] Aquí hay un juego de palabras. El presidente se conoce como Runan (puede leerse como "Igual que un hombre"). El juego de palabras se debe a que los muchachos se están burlando del hecho de que, si bien ella no puede ser considerada como un hombre, sino más bien que es súper masculina.