Lu Yihan salió del cuarto de baño y vio que estaban juntándose. Caminó hacia ellos y se sentó junto a Li Sicheng.
— ¿Preparados para jugar?
—Sí, a verdad o atrevimiento. Ahora, sepárense, no se queden tan juntos.
El sofá tenía forma de anillo y había una mesa grande de cristal en el centro.
Luo Zhan dividió las cartas en dos montones, en uno estaban las cartas de la verdad, y en la otra las de atrevimiento. Las barajó y las colocó en diferentes lugares. Había una botella de cristal en el centro de la mesa, y todos se sentaron a su alrededor.
A Lu Yihan no le importaba lo que fuera a pasar y dijo:
—En este caso, las mujeres embarazas primero, así que es tu turno, Qianqian.
A Su Qianci le encantaban los juegos, así que no le importó ser la primera. Giró la botella, pero no tuvo mucha suerte y le señaló a ella misma. Su Qianci suspiró.
—Yihan, lo has hecho a propósito, ¿verdad?
