—¡Entiendo, hermano! —Ah Mo notó la preocupación de Mu Yuchen, por lo que continuó preguntando— Hermano ...
—Necesito que hagas algo por mí. —dijo Mu Yuchen de repente.
—¿Qué es? —en alerta, Ah Mo preguntó— Escuché que la cuñada sufrió una lesión grave y ayer...
—Qi Feng me pidió que me reuniera con él frente a la tumba de Lingtian a las 9 a.m. éste fin de semana.
—¿Reunirse con él? —Ah Mo parecía vacilante— Hermano, ¿esto es una trampa?
—Me temo que tendré que ir incluso si es una trampa, pero antes de eso, obtendré algunos dividendos de él primero —Mu Yuchen se sentó casualmente en su silla y le entregó a Ah Mo la lista de invitados que Li Si le había dado justo ahora—. Echa un vistazo.
Ligeramente confundido, miró a Mu Yuchen antes de revisar la lista. —¿Una cena de caridad? ¿Qué significa esto?
—Quiero que alguien conozca su lugar y esta es una gran oportunidad para hacerlo.