Mu Yuchen acababa de entrar hace un momento cuando llamaron a la puerta.
—¡Maestro, señora!
Cuando Xi Xiaye salió de la habitación, escuchó a la hermana Wang llamándolos desde afuera, así que caminó hacia la puerta y la abrió para ver a la hermana Wang parada afuera.
—¿Qué ocurre? —Xi Xiaye miró perpleja a la hermana Wang que estaba parada afuera de la puerta.
—Señora, el maestro Ah Mo y la Señora Lingshi están aquí. Parecen bastante preocupados. Dijeron que estaban buscando al maestro. ¡Están justo abajo!
Cuando la hermana Wang vio que Mu Lingshi no se veía del todo bien, no se atrevió a retrasarse mientras corría directamente para informar a Mu Yuchen y Xi Xiaye.
«¿Ah Mo y Ah Shi?»
