—No sabemos cuántas marionetas de rango Celestial hay en esta base. Eres el único capaz de fusionarse con esta gema de control sin sufrir un contragolpe. ¡Ve y fúndete con ella!
Sintiendo más y más auras provenientes de las entradas mientras el grupo de Lin Yun se preparaba para la batalla, Wagner palideció, pero con un rastro de agradable sorpresa en sus ojos.
Sin dudarlo, agarró esa gema dorada y la puso en su frente.
Una marca de sangre apareció de repente entre sus cejas y su piel se abrió, permitiendo que un hilo de sangre fuera absorbido por la gema.
En un instante, la gema esparció una suave luz y pareció derretirse lentamente, transformándose en un líquido dorado que entró en el cráneo de Wagner a través de esa herida.
