—¡Déjame reformularlo! ¡La Torre Negra está requisando a sus tres grandes grupos de mercenarios! —Solan miró al trío con frialdad.
—¿Requisando? ¿Tú solo?
El irascible Dean le hizo una mueca de desdén a Solan y, sobre su cuerpo, destellaron algunas débiles chispas. Al tener el poder de un Santo de Espada de nivel tres, Dean ni siquiera ponía sus ojos sobre Solan.
Solan seguía siendo un Alto Mago mientras que Dean se había convertido en un Santo de Espada.
Pero, en ese momento...
…se escuchó una voz repentina.
—Bien, deténganse ahí. Sus tres grupos de mercenarios parecen haber olvidado que la Torre Negra no está discutiendo con ustedes, ¡nosotros estamos tomando el control! ¿No saben lo que eso significa...?
Todos sintieron un enorme poder que descendía cuando esa voz apareció de golpe.