Uno solo atesoraría las cosas que uno tiene después de perderlas.
En ese momento, Sonia llegó a esa profunda comprensión. Si fuera ella en el pasado, nunca aceptaría esa dura cama de madera. Con las identidades de Sonia y Lilian, deberían dormir en la suave, fragante y cálida cama de plumas, a diferencia de esa dura cama de madera con un colchón de paja debajo hecho de hierbas. A pesar de que estaba limpia de bichos, todavía había un desagradable olor de la fina manta. Si estuviera en el pasado, Sonia no le habría dado una segunda mirada. Pero ahora...