—Saludos... anciano... heredero...
La estruendosa voz resonó y Rhode tembló ante la poderosa fuerza. Afortunadamente, estaba preparado para eso y su constitución era mucho más fuerte que la de los mortales. Si se tratase de un mortal ordinario en su lugar, quizás el mortal habría vomitado sangre y muerto debido a las intensas ondas de choque. De hecho, la ballena del cielo no habló. En vez de eso, fusionó sus pensamientos y el elemento viento para formar el sonido que parecía un estornudo para los mortales.
—Soy... el hijo del elemento viento... Grid... Estoy encantado de... presenciar personalmente... al heredero del Fenómeno Vacío... —La voz de la ballena del cielo resonó.
—Saludos, Grid; hijo del elemento viento. Soy el heredero del Dragón del Vacío, Rhode Alander. He venido aquí de acuerdo con el antiguo contrato espiritual, buscando su ayuda. Espero que pueda ayudarme a proteger este territorio de extraños y luchar a mi lado.