Amund tenía razón: Rhode tenía la intención de hacerlo.
A Rhode se le ocurrieron algunas ideas después de escuchar las palabras de Beni. De hecho, era el que más carecía de mano de obra en ese momento. Aunque muchas tropas estaban estacionadas en el fuerte, sabía que se irían a otras regiones que requerían más su atención cuando surgieran situaciones. Esa fue también la razón por la que Lydia había enviado los buques de guerra mágicos allí, ya que eran los responsables de defender el lugar y también tenía que actuar como transporte para los soldados a otras regiones. Esa era la situación en la guerra. Rhode era solo un señor, después de todo, y sería una historia de fantasía si contara con Lydia para que le entregara todas las tropas.
«Parece que tendré que confiar en mí mismo».
