Lo que Cromwell no podía tolerar era la actitud de esos malditos magos. Esas caras altas y poderosas volvían loco a Cromwell. No podía aceptar que esas personas que se habían esforzado tanto por acompañarle, ahora pudieran reírse tan despectivamente de él.
Cromwell no podía recordar cómo se las había arreglado para superar esa mañana.
Cada vez que se veía obligado a mostrar una sonrisa amistosa, todo lo que recibía a cambio eran hombros fríos.
Hasta que finalmente vio a Kevin.
Cromwell, quien había tratado con Kevin varias veces antes, sabía que si quedaba alguna persona honesta en el Gremio de Magos de Jarrosus, definitivamente era Kevin. Para la mente de Cromwell era mucho más fácil hablar con una persona honesta.
—¡Mago Kevin, cuánto tiempo sin verte!
—Sí ha pasado mucho, señor Cromwell. —Al ver a Cromwell, empezó a dolerle la cabeza a Kevin. Si hubiera podido, le habría gustado decirle:
—¡Mejor no haberte visto!
Era una pena que ya se hubieran visto. Cromwell, que era como un hombre que se ahoga y se aferra a cualquier cosa que le pueda salvar la vida, se apresuró y estrechó las manos de Kevin, sin importarle si este último quería o no.
—Mucho tiempo sin verte, mucho tiempo sin verte...
Por supuesto, ignoró a Lin Li, quien estaba de pie a su lado.
Cromwell había pensado que, ahora que Gerian estaba enfermo de gravedad, la persona que debería supervisar el Gremio de la Magia era, naturalmente, su sobrino, Kevin. ¿Qué razón había para no acoger a los encargados del Gremio y, en su lugar, entablar una conversación con un mago en apuros? Además, como heredero de la familia Merlín, Cromwell no podía rebajarse e iniciar un saludo con un mago de bajo nivel.
Lin Li era bueno captando indirectas. Cuando la expresión de Cromwell coincidió con su mirada, supo exactamente lo que estaba pasando por su mente.
Pero era mejor aceptar ser ignorado, si esa cara sonriente le iba a causar problemas en el futuro.
Cromwell había pensado en su súplica antes de venir, pero como tuvo que contenerla durante toda la mañana, casi se pone enfermo. Ahora que finalmente había alcanzado a Kevin, no le iba a dar la oportunidad de resistirse. No se había relajado desde que había agarrado las manos de Kevin. Comenzó con la amistad que habían compartido desde la infancia y, luego, habló sobre la amistad profunda y duradera entre la familia Merlín y el Gremio la deMagia.
El bombardeo de palabras y favores estaba sumiendo a Kevin en un sopor miserable.
—Hermano Kevin, siendo honesto, quería que supiera que realmente le admiro. Mi padre una vez me dijo que usted es el único joven de toda la ciudad de Jarrosus con un don de magia más fuerte que el mío. No le creí, hasta el año pasado, cuando usted superó el nivel ocho en la certificación de mago. En ese momentome di cuenta de que la visión de mi padre no era errónea.
Al escuchar esto, una persona tan honrada como Kevin difícilmente podría abstenerse de maldecir. Cabeza hueca, ¡uno debe evitar la cara de la persona a la que va a golpear! ¿Es que no sabía eso?
Kevin miró con culpabilidad a Lin Li y pensó:
¾¿Superar el nivel ocho te sorprende? Si conocieras a alguien que ha estado expuesto a la magia solo durante tres meses y ha superado el nivel ocho, ¿no te estarías asustarías de inmediato? Sin mencionar que tu padre probablemente también se volvería loco si viera brillar la bola de cristal durante veintiocho minutos...Rechazándome como un genio mágico frente a estapersona, ¿no está tratando de empujarme hacia un abismo de fuego?
Kevin por fin vio un destello plateado cuando el sol estaba a punto de ponerse; había esperado mucho a que Cromwell le preguntara por Gerian.
—Lo siento mucho, el Presidente se ha cansado mucho recientemente y no se encuentra muy bien. Está descansando en la Torre Esmeralda en este momento.
—Kevin estaba muy agitado cuando pronunció esta frase. Era como si la raza que había sido esclavizada durante miles de años, de repente, viera el alba de la victoria al final de la Edad Oscura.
—Eso es terrible. —La expresión de Cromwell era de aflicción.
—Entonces, ¿puedo verlo? Mi padre me dijo que le trajera un pequeño regalo cuando salí de casa esta mañana.
Al fin. Kevin había esperado esa frase después de haber sido torturado toda la tarde.
—¿Visitas? Bueno... lo siento mucho. El presidente Gerian está gravemente enfermo ahora mismo y es una enfermedad infecciosa maligna. Si te infectas, será un gran cargo para nuestra conciencia. ¿Por qué no vuelves cuando pasen unos días?
Kevin había repetido esto por lo menos mil veces en los últimos dos días, pero nunca se había sentido tan feliz al decirlo. Las palabras se escucharon cuando abrió la boca y habló sin sentirse agobiarse ni preocuparse de que pudiera hablar en sueños esa noche. Incluso sintió que se quitaba un peso de su corazón después de haber terminado la frase…
—...
La sonrisa de Cromwell se le congeló. Este no era el resultado que esperaba después de todas las súplicas, sonrisas y halagos meticulosamente preparados. Por un momento, Cromwell se quedó,como perdido, mirando fijamente a Kevin.
No comprendía cómo las cosas habían llegado a este punto.
—...—Incluso Lin Li sacudía la cabeza mientras escuchaba desde un lado. La circunstancia era un factor que daba miedo. Incluso una persona honrada como Kevin se envenenaba mientras abría la bocaal mentir.
La sonrisa que intentaba ser un signo de resignación fue consideradacomo un sarcasmo inefable a los ojos de Cromwell. La negativa de Kevin dejó su pechosin aliento y, de repente, encontró una manera de desahogarse.
—¡¿De qué te ríes?!— La agradable cara de Cromwell se retorció y un par de ojos rojos brillantes se fijaron en Lin Li con una mirada fulminante. Parecía que esa expresión estuviera a punto de devorar vivo a Lin Li.
—Señor Cromwell...—Kevin se había sentido eufórico antes y nunca imaginó que las cosas progresarían así en un abrir y cerrar de ojos. Cuando finalmente se dio cuenta y estaba a punto de intervenir, ya era demasiado tarde. Los ojos de Cromwell eran diabólicos y su expresión retorcida. Su agitado arrebato hizo que lloviera saliva sobre la cara de Lin Li.
¾Esto es el fin…¾ Kevin sabía que las cosas estaban mal cuando recordó a los dos hombres desafortunados en la casa de trueque de Jarrosus. Había descubierto el carácter de Lin Li después de pasar mucho tiempo con él. Su carácter era casi como el de Gerian. Mientras no le provocaran, todo podía hablarse agradablemente. Pero lo hacían, no mostraba misericordia con nadie que cayera en sus manos. No se movería innecesariamente, pero una vez que se moviera, lo haría en la dirección de la muerte.
Que el Gremio de la Magia hubiera tenido algunas fricciones con la familia Merlín no quitaba que, después de todo, fuera la máxima influencia en la ciudad de Jarrosus. Si algo le sucedía a Cromwell aquí, Kevin no podía ni imaginarse el caos en el que se sumiría la ciudad de Jarrosus.
—¿Sabes lo que son los modales? Las cosas que he discutido con el mago Kevin son secretos superiores que pertenecen a la familia Merlín y al Gremio de la Magia. ¿De qué vas? ¿Has olvidado quién eres después de haber ingresado en el Gremio de la Magia y tienes las agallas de escuchar a escondidas nuestros mayores secretos? ¿Todavía estás aquí? —Lo que hizo que Kevin se preocupara era que Cromwell no sabía lo que estaba haciendo mientras continuaba con su clamorimprudente.