Las grietas en el escudo torre eran delgadas y densas, y se extendían como una plaga de sonidos crujientes e infinitos. En un abrir y cerrar de ojos, habían cubierto la superficie del escudo.
Los ojos pequeños del gordo se ensancharon como las grietas.
¡Pum! Después, se escuchó un ruido sordo e innumerables fragmentos pequeños se esparcieron como el polvo, llenando la espaciosa tienda de armas.
El fuerte y pesado escudo torre fue destruido con unsolo golpe de la espada.
¿Qué tipo de arma enfermiza era esta...?
Todos se quedaron aturdidos. Sus bocas abiertas eran tan grandes como para llenarlas con un huevo entero.
Justo cuando el escudo torre fue destruido, el gordo se dejó caer al suelo. Su corazón era como brasas consumiéndose. Se acabó. Se acabó todo…