Luo Yuan fue despertado por la bocina de un coche publicitario. Era temprano en la mañana y el Sol aún no había subido en el horizonte.
—¡Mis queridos ciudadanos! Habrá una cantidad específica de alimentos y agua disponible para la compra con el fin de mantener la armonía y mantener el precio de los bienes. El Ayuntamiento de la ciudad ha establecido unos pocos expendios de suministro en una gran tienda de abarrotes, todos los ciudadanos son bienvenidos a hacer compras mostrando su cédula de identidad, repito, es solo un suministro limitado.
—¡Mi queridos ciudadanos!... ¡Mis queridos ciudadanos! —Los altavoces seguían repitiendo la misma cosa hasta que se despertó por completo. Se levantó, se puso la ropa y abrió la puerta.
—¿Qué está pasando afuera? —Bostezó Zhao Yali saliendo en pijama de su dormitorio.
—El gobierno ha tomado algunas medidas, podemos obtener una cantidad específica de alimentos y agua —respondió Luo Yuan felizmente. Aunque había almacenado algo de comida no perecedera, no había podido encontrar verduras ni carne fresca, siempre estaban agotadas. Además, tarde o temprano esa comida se acabaría también. Sin embargo, no necesitaban preocuparse más, eso definitivamente eran buenas noticias, al fin y al cabo, a nadie le gustaba la agitación, salvo a los arribistas y los locos.
—Déjame ir a ver si podemos conseguir algunos —dijo Luo Yuan.
—Vamos juntos, tal vez podríamos conseguir el doble —sugirió Zhao Yali.
—Buena idea, ve a cambiarte, debemos ir tan pronto como sea posible, creo que ni es necesario cepillarte los dientes —le recordó Luo Yuan.
—¡Ay, no! —Solo entonces Zhao se dio cuenta de que todavía estaban en pijamas, su rostro se puso rojo. Rápidamente cerró la puerta y se fue a cambiar. Diez minutos más tarde salió de su habitación, parecía que se había maquillado ligeramente. Luo Yuan se sintió incómodo mientras salían de la casa. Se sorprendió al ver lo que estaba sucediendo afuera.
El distrito estaba extremadamente lleno, jamás se había dado cuenta de que había tantos residentes en la zona. Todas esas personas parecían atraídas por algo y las colas humanas que formaban habían causado tráfico. Los que estaban en coche no dejaban de tocar la bocina, atrapados en el tráfico humano, otros salían de sus coches porque no se habían movido en absoluto. La gente había traído sus cestas de compra y de ropa, algunos habían traído incluso sus maletas.
Sin embargo, la mayoría de ellos se habían quedado con las manos vacías, al igual que Luo Yuan. Cuando llegaron a la calle principal, se dieron cuenta de que lo que habían visto antes no era nada comparado con la multitud delante de ellos.
Las calles estaban llenas de gente y el tráfico había empeorado. Ambos se estrecharon entre la multitud, sin tener que hacer mucho esfuerzo porque la multitud los empujaba hacia adelante. Esto era algo que Luo Yuan no podría haber imaginado, por lo general solo veía estos fenómenos en la televisión.
—¡Guau! Esto realmente está sucediendo, ¿eh? —Zhao Yali parecía emocionada de ver a toda esa multitud —. Solía pensar que la gente en esta ciudad era fría y eso la hacía sentir solitaria. No puedo creer que esto esté sucediendo, es como lo que mi madre solía decirme.
Luo Yuan sacudió la cabeza, sin comprenderla.
—Veremos —replicó—, no habría venido de saber que habría tanta gente, no tengo ni idea de cuánto tiempo tendremos que esperar en la fila —ya se estaba arrepintiendo.
—Tal vez sea porque me voy pronto, pero siempre pensé que pasaría el resto de mi vida en esta ciudad, que me casaría y tendría hijos, sin embargo me voy —parecía deprimida y tenía lágrimas en los ojos.
—Oye, tienes que dejar esas cosas tristes. En realidad, las aldeas ya no son seguras, ¿por qué no convencer a tus padres de mudarse a la ciudad? Hay muchos animales mutados allí, sería más seguro si se mudaran aquí—sugirió Luo Yuan, tratando de consolarla.
—Como sea, de todos modos, realmente quiero darte las gracias, no hubiera podido continuar con mi vida sin tu apoyo —se sinceró Zhao Yali.
—No hice nada, estás siendo demasiado amable, ¿olvidaste que llevamos mucho tiempo viviendo en la misma casa? —Dijo Luo Yuan.
—De todos modos, por favor, mantente en contacto —dijo Zhao Yali seriamente.
—Oh, no es el fin del mundo. Mañana te acompañaré, puedes darme las gracias cuando llegues a casa —Luo Yuan la interrumpió. Finalmente llegaron tienda de abarrotes más cercana.
Había dos líneas de policías totalmente armados, sostenían rifles automáticos controlando la situación y manteniendo el orden, lo que causó un leve alboroto entre la multitud, pero la situación se estabilizó.
Luo Yuan y Zhao Yali corrieron dentro del mercado siguiendo el flujo de la multitud. Muchas instalaciones habían sido retiradas y reemplazadas por grandes cantidades de alimentos.
Había una cuerda amarilla colocada alrededor de la zona vigilada, los policías estaban de pie aproximadamente a un metro de los expendios. Aunque había aproximadamente 400 a 500 expendios, las colas todavía se movían muy lentamente.
Hacía calor y había mucha humedad, ambos estaban sudando en 10 minutos. Luo Yuan se sintió bien porque era físicamente fuerte y estaba en forma desde que había conseguido el superpoder, se recuperaba de las enfermedades y lesiones más rápido que las personas promedio. Sin embargo, Zhao Yali era más débil, probablemente sufriría un golpe de calor antes de que pudieran llegar al expendio.
—¿Qué te parece si vamos al frente e intentamos colarnos? —sugirió Luo Yuan.
—No creo que eso funcione —dijo Zhao Yali mientras se abanicaba con las manos.
—Intentemos, agarra mi mano —dijo Luo Yuan.
Luo Yuan no esperó a que ella respondiera, agarró su mano y se apretó entre la multitud. Era muy fuerte, su fuerza era 1,5 veces mayor que la de una persona normal.
Ambos se movieron entre los huecos de la multitud, oyendo algunas quejas, sin embargo, no eran las únicas personas que lo hacían. Esto era algo muy común para el pueblo chino, de hecho, la mayoría de los adultos trabajadores lo hacían todos los días cuando tomaban el tren o el autobús para ir a trabajar. Después de un rato llegaron al mostrador uno.
—¿Por qué solo me dan esto? ¡Es mucho menos de lo que le dan a otros! —se quejaba una anciana.
—Porque no eres de la zona, por favor revisa el aviso en la pizarra de afuera —respondió impaciente la joven del mostrador —. Por favor, abra paso a la siguiente persona. ¡Siguiente!
La anciana fue alejada empujada por la multitud.
—Quiero de todo, dame la porción más grande —dijo un tipo calvo con un gran collar de oro, sacudiendo un fajo de dinero.
—Cada persona solo puede comprar suministros para tres días usando su tarjeta de identidad y solo puedes regresar después de tres días.
—¿No puedes hacer un arreglo especial?, tengo más que suficiente dinero —le preguntó el hombre calvo de manera irrespetuosa.
—Lo siento, no puedo hacer eso, es la política. ¡Son 200 Yuanes, por favor! —dijo el empleado después de explicarle.
—Parece que solo puedo comprar comida del mercado negro, entonces —murmuró el hombre calvo mientras pagaba y tomaba sus provisiones.
Finalmente, Luo Yuan se acercó al cajero. Le pasó su tarjeta de identidad junto con 200 Yuanes.
El cajero le preguntó:
—Tres días ¿verdad? —Luego pasó a registrar todos los detalles en su computadora, mientras que otro miembro del personal entregaba a Luo Yuan las provisiones. Ambos compraron y rápidamente salieron de la multitud.
—¡Dios, qué calor hacía allí! —Dijo Zhao Yali mientras soltaba el brazo de Luo Yuan y miraba a la multitud —. Veamos qué hay dentro de la bolsa.
—Una bolsa de 2,5 kg de arroz blanco, 500 gramos de carne, 1 kg de vegetales, tres manzanas y 2,5 litros de agua potable. ¡Ah!, tres trozos de chocolate y un pequeño paquete de leche y azúcar —dijo Luo Yuan.
Zhao Yali parecía sorprendida.
—Es demasiado dinero por estas pequeñas cosas, solía gastar solo 50 Yuanes por todo. ¡El dinero está perdiendo su valor!
—Esto se considera barato en estos días, ¿qué esperabas? En cualquier caso, es mucho más barato que el mercado negro —respondió Luo Yuan.
Sabía que los alimentos no perecederos en el mercado negro costaban alrededor de 25 Yuanes por 500 gramos y la carne se vendía por 100 Yuanes cada 500 gramos, entonces 200 Yuanes para las cosas que acababan de comprar en el expendio era barato en comparación.
—Pero son suministrados por el gobierno, ¿cómo pueden ser tan caros?, ¿están locos? Uf, gracias a Dios que me voy pronto, de lo contrario no creo que pueda de sobrevivir en esta ciudad —estaba enojada. Ella trabajaba en una compañía de inversión extranjera y su salario era menor a 3.000 Yuanes, no habría sido capaz de sobrevivir, incluso si su empresa no hubiera cerrado.
—¡Es verdad! —Dijo Luo Yuan con una sonrisa.
En realidad, los pueblos no parecen estar mejor que la ciudad. El capitán Chen de la comisaría de Gaotang había llamado a Luo Yuan unos días atrás para recordarle que debía guardar algo de comida para emergencias.
No había dicho mucho, pero Luo Yuan podía percibir lo crítica que era la situación, y había decidido ir a ver. Cuando llegó a Gaotang todo parecía estar bien, el gobierno había quemado la mayor parte de las tierras de cultivo y sacado muchos árboles grandes. Sin embargo, llegando a un pequeño cruce, notó que las nuevas cosechas en el arrozal no estaban creciendo siguiendo la cálida temperatura de diciembre, sino que la maleza había crecido mucho más que las jóvenes plantas de arroz.
La maleza habían ocupado todos los espacios entre el arrozal, impidiendo que el arroz absorbiera la luz solar para la fotosíntesis.
Un viejo granjero le comentó que esa maleza era difícil de eliminar usando pesticidas y la única otra forma de eliminarlas era arrancándola. Sin embargo, había demasiadas serpientes venenosas en el arrozal y nadie era lo suficientemente valiente como para hacerlo.
Luo Yuan se sorprendió por la situación en el pueblo, ni siquiera recordaba volver a casa, todo lo que sabía era que el mundo estaba a punto de cambiar.
La tarde siguiente, Luo Yuan y Zhao Yali estaban listos para partir. Luo Yuan tomó dos maletas y llamó a un taxi para que los lleve a la estación de tren.
—¿Por qué llevas esa caja de madera? —preguntó Zhao Yali, mirando la caja que tenía en sus manos.
—Oh, es una obra de arte —respondió Luo Yuan con una sonrisa.
—En realidad, no necesitas comprar nada para mis padres, podrían hacerse una idea equivocada —dijo ella con impotencia. Al parecer, había malentendido a Luo Yuan, si llevaba un regalo estaba segura que sus padres no creerían en ninguna explicación que les diera.
—Tú te equivocas, esto no es un regalo, me olvidé de comprarles uno, ¡podemos comprar algo en la estación de tren! —Dijo con una sonrisa.
—Por favor, no, o no me la voy a acabar —se apresuró a detenerlo.
—¿Van a casa a ver a tus padres?, ¿y el arroz?, estoy seguro de que a tu futura suegra le gustará—el taxista se unió a la conversación para divertirse.
Las mejillas de Zhao Yali se pusieron rosadas.
—En realidad somos solo amigos, por eso está preocupada —explicó Luo Yuan cuando vio el color en sus mejillas.
—Ah, ya veo, mi esposa y yo también éramos así y terminamos casándonos. De todos modos, ¿a dónde se dirigen?, quiero decir, ¿cuál es su destino final? —Preguntó el conductor.
—¡La ciudad de Yushui! —Luo Yuan respondió en voz alta, un poco alterado.
—¿No está cerca de Yushan? —preguntó de repente el conductor.
—¡Sí! Yushan se encuentra en la región norte de la ciudad de Yushui, es un famoso lugar turístico, ¿lo conoce? —Preguntó Zhao Yali al conductor, parecía emocionada de estar hablando de su ciudad natal.
—En, en realidad no, pero he oído de mi amigo que muchas personas han muerto recientemente en la aldea, incluso vehículos blindados llegaron un día y bombardearon el lugar —dijo seriamente el conductor.
Zhao Yali se asustó.
Luo Yuan le dio unos golpecitos en el hombro para tranquilizarla y preguntó:
—¿Tanto así? ¿Cuán confiable es su fuente?
—Yo no bromearía con algo como esto y no conseguiría nada de eso de todos modos. Mis amigos son de la ciudad de Yushui, pero trabajan en Donghu. Tuvieron que mudar a sus padres aquí porque la ciudad de Donghu parece ser más segura. En cualquier otro lugar al que vayas hay desastre y caos —fueron las palabras del conductor.
—¿Hace cuánto tiempo que oíste eso? —Preguntó Luo Yuan.
—Hace unos tres días, debería estar todo bien ahora. De todos modos, nunca se puede ser demasiado cuidadoso —explicó el conductor.
—Gracias, es una suerte que nos hayas contado, realmente lo apreciamos —dijo Luo Yuan rápidamente al conductor.
—Ni lo digas, todo el mundo está pasando un mal momento, se siente como si el fin del mundo estuviera llegando y el gobierno sigue siendo estricto con nosotros. Si me preguntas, todo el mundo debería tener un arma para defenderse —el conductor se quejó.
—Yuan, ¿qué debo hacer? Estoy preocupada por mis padres —dijo Zhao Yali ansiosa.
—Pensé que los habías llamado anoche, ¿podrías llamarlos de nuevo? —sugirió Luo Yuan.
—Sí, sí—rápidamente sacó su teléfono y marcó.
—Hola, mamá, ¿tú y papá están bien? Oh, nada especial, solo para saber. Tomaré el tren de las 1:30 pm, debería estar allí antes de las 4 pm. Llevo un colega conmigo, es un chico, pero no es lo que estás pensando. Ah, mamá, ¿sucedió algo en la ciudad de Yushui? ¿Un ataque de roedores?, muy bien, voy a colgar —Zhao Yali terminó la llamada, parecía aliviada —. Ambos están seguros. Un ataque de roedores, no es nada, ¿verdad? —preguntó Zhao Yali.
"¿Solo roedores?" Luo Yuan pensó en silencio, tenía un mal presentimiento, sabía que una Misión de Nivel F + no sería tan fácil de manejar.
Los dos llegaron a la estación de tren, pero en el puesto de control no le permitieron pasar con la Zhanmadao. Luo Yuan necesitaba arreglar un envío exprés y asegurarse de que llegara al mismo tiempo que ellos. No estaba seguro de poder completar la misión sin la espada.
La estación de tren estaba muy concurrida porque se acercaba la temporada de Año Nuevo chino. Todo el mundo parecía deprimido y ansioso por el futuro.
Zhao Yali y Luo Yuan se quedaron a un lado y esperaron porque no pudieron encontrar un asiento. Luo Yuan se dio cuenta de que muchos trenes estaban retrasados, también el tren que iba a la ciudad de Yushui. Cerca de las de las 13:30, pareció que algo había sucedido a los trenes en el camino a la estación.
—Nuestro tren también se retrasó, eso no es nada puntual —Zhao Yali se quejó.
—Está bien, lo importante es que lleguemos a nuestro destino —Luo Yuan la consoló.
Afortunadamente, no había habido ningún accidente, y el tren llegó 30 minutos después.
Luo Yuan validó su boleto y entró en la plataforma, a su alrededor todos parecían sorprendidos, algunos incluso estaban gritando. El exterior del tren estaba cubierto de sangre y también había plumas en algunos lugares. Luo Yuan se inclinó y recogió una pluma gris, utilizó su superpoder para identificarla.
"Una pluma de un gorrión".
"Funciones: materiales".
"Rareza: Blanca".
"Peso: 10 gramos".
"Comentarios: Esta es una pluma de un gorrión mutante".
"¿Un gorrión mutante? ¿El tren fue atacado por gorriones? A juzgar por el tamaño de la pluma, suponía que los gorriones debían de tener un pie de altura."
Si las aves también mutaron, serían muy malas noticias para el transporte aéreo, incluso podría tener que cerrar por completo. Lo peor de las aves era que podían ir mucho más alto que otras bestias, haciendo más difícil cualquier defensa contra ellas.
No pudieron evitar la llegada de animales mutantes, incluso si el gobierno cortó los árboles y quemó los bosques. Luo Yuan se sintió frío al pensar en miles de pájaros enormes volando sobre el cielo de la ciudad. "Espero que esto no suceda en mi ciudad", trató de consolarse. Con el gobierno quemando bosques a gran escala, esos animales hambrientos tendrán que atrapar a los humanos para llenar sus estómagos vacíos.
—No tengo ni idea de cómo sucedió esto —dijo Zhao Yali temblando agarrada del brazo de Luo Yuan.
Luo Yuan no sabía cómo consolarla, así que simplemente dijo:
—Vamos a subir al tren o lo perderemos.