Los seis de la Academia Zephyr eran como malditos. Dentro de todo el banquete, masas de discípulos de las otras academias los señalaban y susurraban sobre ellos. La Academia Zephyr ya había sido un "tema candente" este año y con el trato favorecido de Lei Chen sobre ellos, fueron arrojados inmediatamente al fango.
Para ser justos, los seis poseían una apariencia sobresaliente, pero para todos los otros jóvenes allí, no podían encontrar que les gustara. Después de todo, todos estaban aquí para competir y eclipsar a los demás en el Torneo de Batalla de Espiritual, y antes de que la competencia comenzara, la gente de la Academia Zephyr ya había ganado el Príncipe Heredero, el favor de Lei Chen, ¿cómo podría esperarse que estuvieran felíces por eso?
—Miau~ —La gatita negra yacía en el regazo de Jun Wu Xie, sus agudas orejas escuchaban esos sarcasmos espinosos y apenas disimulados, mientras balanceaba su cola lentamente en el aire.