—Joven Maestro, ¿me preguntaba si tienes otra botella del mismo elixir contigo? Estoy dispuesto a usar cualquier cosa para intercambiarlo contigo. Lo único que quiero es que mi amada sea feliz consiguiendo un regalo adecuado para ella, por favor ayúdame a cumplir este deseo —Mo Xuan Fei arrogantemente se interpuso entre los dos mientras expresaba sus intenciones.
No sabía qué respaldo tenía este niño, pero este viaje de hoy fue para animar a Bai Yun Xian, si no, todo esto hubiera sido en vano. Él no tenía más ideas para animarla.
Ese anciano no sabía sus cosas y no quería la Píldora Qing Yun. Él, sin embargo, trató un elixir sin nombre con un origen desconocido como un tesoro precioso. ¡Quería demostrar que con su identidad y recursos podía conseguir lo que quisiera! Ese tonto anciano debería despertar de su estupor.
Jun Wu Xie entrecerró los ojos mientras miraba a Mo Xuan Fei.
