"¡Quién es ese! ?" ¡El líder de los matones vio ante sus ojos que sus compañeros salían volando y sus ojos inmediatamente miraron al recién llegado!
¡Justo delante de la pareja de madre e hijo que se abrazaban, una pequeña figura se paró orgullosamente erguida!
Era un joven con un rostro delicadamente atractivo. Vestido con ropa de cáñamo simple y tosca, no se veía nada especial, ¡excepto por ese par de ojos que enviaban escalofríos hasta los huesos!
¡Frío pero claro como el agua!
El matón miró confundido al joven que había aparecido de repente, midiendo la apariencia de la persona. Al ver que estaba vestido con ropa tosca, asumió que solo era un refugiado que se quedaba allí.
"¿¡De dónde saliste este niño bastardo!? ¡Debes estar cansado de vivir! ¡Cómo te atreves a interrumpir mi diversión! ¿Crees que puedo hacerte salir corriendo de aquí en cualquier momento? ¡Maldita sea!"
