Hao Ren abrió la puerta y entró. Zhao Yanzi ya se había puesto su pijama rosadas favorito, y ya se había quitado las colitas, haciendo que su negro y brillante cabello cubriera en parte su rostro.
Se sentó frente a su escritorio y realmente estaba haciendo su tarea.
—¡Um! ¡Um! —hizo algunos sonidos Hao Ren con su nariz.
Zhao Yanzi no le habló a Hao Ren. Observaba su tarea, hacía pucheros y sostenía un lápiz de punta redonda mientras intentaba solucionar los problemas.
Hao Ren se acercó despacio, tomó una silla, la colocó a su lado y tomó asiento.
Los cursos del Noveno Grado eran más intensos, y la mejor estrategia para conseguir buenas calificaciones en los exámenes de admisión del Ciclo Diversificado era responder muchísimas preguntas.
Los profesores de cada materia habían entregado muchos exámenes de prueba para este fin de semana, y Zhao Yanzi dejó de copiar las respuestas de Ling y decidió resolver las preguntas por su cuenta.