Hao Ren tomó la lanza dorada mientras salía de la arena. Los cultivadores a su alrededor le abrieron camino para dejarlo pasar.
Tras derrotar a Wang Xi, Hao Ren estaba entre los seis mejores en el área de exámenes este, lo que significaba que ahora estaba entre los 24 mejores en los exámenes del Altar del Dios Dragón. Siempre que pudiera ganar otra batalla, ¡podría ascender de ser un Inspector Asistente a un Inspector Oficial!
Blanquita se encogió a su tamaño de una palma, y saltó de arriba abajo a los pies de Hao Ren. Sin embargo, aun con lo adorable que era, ninguno de los cultivadores en el área se atrevió a menospreciarla.
—¡Nada mal! —dijo Zhao Yanzi emocionada, mientras se acercaba a Hao Ren.
—Te devolveré esto —dijo Hao Ren regresándole la lanza dorada.
Zhao Yanzi le pasó la lanza dorada al Primer Ministro Xia y este último la puso detrás de su espalda. Sorpresivamente, había un espacio de almacenamiento en la joroba del Primer Ministro Xia.