Ya era tarde por la noche cuando regresaron al apartamento.
—¡Ten!
Su Han sacó una pequeña botella de su anillo de almacenamiento y se la arrojó a Hao Ren.
Él abrió la botella y un agradable aroma salió de ella.
Incluso cuando no era un gran elixir, aún era un ungüento curativo bastante decente.
—Muchas gracias —Hao Ren le agradeció a Su Han mientras tomaba un poco del ungüento.
Su Han frunció los labios y no dijo una palabra.
Ella era quien le había dejado esas heridas a Hao Ren y aun asíél le estaba agradeciendo. Eso lo hizo sentirse un poco raro.
No obstante, también hizo que ella recordara a su propia maestra, la Anciana Xingyue. Su Han era la "niña rara" del Palacio Dragón del Océano Este ya que todos los otros cultivadores eran del elemento agua, mientras que ella era tanto del elemento metal como del elemento agua.