Hao Ren ayudó a Zhao Yanzi a llegar al sofá antes de marcar el número de Su Han.
Tras varios repiques, finalmente se conectó la llamada.
—¿Qué? —dijo Su Han con su fría voz a través del teléfono.
—Zi está enferma. ¿Puedo llevarla a tu casa? —preguntó Hao Ren, sin perder tiempo en saludos.
—Ok —dijo Su Han dándole una respuesta carente de emociones. Obviamente, la enfermedad no era algo importante para ella.
Habiendo enlistado la ayuda de Su Han, Hao Ren arropó los hombros de Zhao Yanzi con un abrigo antes de sacarla a rastras de la casa.
Tomaron un taxi hacia el lujoso Complejo de la Ciudad de las Flores. Hao Ren acompaño a Zhao Yanzi hasta la puerta de Su Han y tocó el timbre.
Su Han abrió la puerta en sus grises pijamas florales.
Hao Ren ayudó a Zhao Yanzi a entrar en la cálida habitación de Su Han y se relajó al instante.