Gran langosta voladora.
Cuando salió el nombre de este platillo, todos los presentes se dieron cuenta de que conocían muy bien este platillo, pues en las anteriores fiestas imperiales, este platillo les dejó una huella muy profunda.
Después de todo, este plato se preparó con un Emperador Bestia de cinco estrellas. Aunque no hubo mucha técnica involucrada, para las muchas personas que miraban, todavía era un plato visualmente impactante.
Parecía que este plato no había sido modificado demasiado por el jefe de cocina. Al menos, el nombre no se había cambiado.
Sin embargo, el vapor y la fragancia que se esparcieron causaron que los espectadores se sorprendieran un poco.
Este plato probó el control de calor de un chef, ya que afectaría la calidad de la carne y el sabor de este plato.
Después de quitar la tapa, el vapor se esparció y el plato dentro se reflejó en los ojos de todos.