Chu Changsheng pensó que todo el crédito y la reputación que había construido durante toda su vida habían sido eliminados luego de estas horas.
Nunca imaginó que un día, varias personas vendrían a admirarlo y observarlo de esta manera...
Era cierto, lo estaban observando. Grupos de mujeres de mediana edad se amontonaban, mirándolo con ojos brillantes. Chu Changsheng sintió todo su cuerpo tensarse.
Ese montón de mujeres de mediana edad deslizaban sus ojos por su cuerpo, poniéndole la piel de gallina. Cuando sus ojos miraban su abdomen bajo, Chu Changsheng sentía como si una ráfaga de viento frío soplara. Le daba una ligera sensación de tristeza.
Mu Cheng llegó, vistiendo un llamativo vestido rojo con una gran abertura en el pecho, revelando su aparentemente infinito escote. Caminando con un par de exquisitos tacones de cristal, estaba llena de encanto y era casi demasiado hermosa para la vista.