La imagen fantasma de una enorme torre rojo sangre repentinamente se elevó en el cielo, y todos presenciaron su aparición.
Las fluctuaciones que emitía la torre fantasma rojo sangre eran tan intensas que todos sintieron su sangre y energía verdadera volverse turbulenta. Todos podían sentir el aura tiránica que emanaba de la torre.
Incontables auras poderosas estallaron, y el sonido de innumerables cadenas siendo golpeadas entre sí resonó en todo el reino secreto. Ningún experto de nivel divino podía ignorarlo.
En una isla llena de rocas amarillas, un hombre diabólico, que tenía dos cadenas balanceándose detrás de él, lamió sus labios rojo intenso.
En una isla verdosa y exuberante, había dos personas vestidas con túnicas negras que llevaban un cofre de latón en sus espaldas. Ambos levantaron sus cabezas y miraron a esa gigantesca torre rojo sangre con miradas profundas.