¿Alas asadas?
Los ojos del Rey Dragón Negro brillaban, y su cabeza calva también brillaba como un espejo. Levantó la cabeza y miró al cielo.
Allí, una figura agitaba sus alas mientras flotaba en el vacío.
La tormenta se extendía por todo el país. El fuerte viento soplaba sin cesar, y bajo ese viento, esa figura se quedó quieta durante mucho tiempo en la tormenta.
El Rey Demonio Halcón Demoníaco no pensaba que el barco del Inframundo estaría en el Mar Eterno. Además, ese chef del Valle de la Gula también estaba allí.
¿Estaban siendo perseguidos? ¡¿Cómo podría la otra parte ser como un alma que aún no se ha movido?!
Ver que el Rey Demonio Rana Demoníaca se había convertido en un ingrediente fue muy doloroso. Una vez que los otros reyes demonio se enteraran de eso, el dolor en sus corazones sería aún más intenso.
Por mucho que el Rey Demonio Halcón Demoníaco quisiera vengar a su camarada, sabía que era imposible.