¡Lub-dub!
El sonido de los latidos se hizo cada vez más tenue...
Bu Fang abrió la boca y de ella salió una energía densa. Frunció el ceño al darse cuenta de que el Corazón de Taotie, que estaba atado por los vendajes, comenzaba a entrar lentamente en su cuerpo.
El corazón de Bu Fang palpitaba salvajemente. Mientras latía vigorosamente, se sincronizó lentamente con el latido del Corazón de Taotie.
Las almas del Taotie Negro y del Taotie Blanco rugían mientras el vendaje se enrollaba cada vez más. Finalmente, la última cadena que restringía el corazón del Taotie se rompió.
Al momento siguiente, Bu Fang sintió que el Corazón de Taotie se acercaba a él. Parecía que quería abrirse paso hasta su corazón.
Las pupilas de Bu Fang se contrajeron y cerró la boca con fuerza. Sus ojos emitieron un brillo resplandeciente.
El aullido que salía del subsuelo se hizo tan agudo que casi les perforó los tímpanos a todos.