¡Wush, wush, wush!
En el denso bosque, una figura esbelta avanzaba rápidamente, con una velocidad impresionante. Su figura saltaba de una gran rama de árbol mientras salía disparada como una estrella fugaz.
Mientras avanzaba, todo su cabello blanco revoloteaba detrás de ella, como si fuera una tela húmeda agitándose.
Incontables bestias espirituales aullaban bajo en el denso bosque, pero esta persona ingeniosamente se había alejado de estas.
Esta persona parecía estar familiarizada con esta tierra, atravesando por el medio de los exuberantes árboles, con un rostro solemne y un talismán de jade en su mano. Una luz deslumbrante parecía extenderse por todo su cuerpo, como si una energía sin forma estuviera guiando su paso.