Justo cuando Shi Yao se preguntaba cómo responder a Lin Jiage, de repente alguien más la llamó: —Querida Yaoyao...
¿Querida Yaoyao?
Esa voz y ese tono... Es claramente ese hombre de ayer...
Lin Jiage se volvió instintivamente para mirar en la dirección de donde provenía la voz.
Un joven que vestía una camisa negra con mangas cortas acababa de salir del apartamento de Shi Yao y se dirigía hacia ella.
En el momento en que escuchó esa voz, Shi Yao también se volvió para mirar por reflejo.
Quiso responderle al joven, pero antes de que pudiera hablar, de repente sintió una sensación escalofriante que emanaba de detrás de ella.
Inconscientemente miró hacia atrás, a Lin Jiage, pero aparte de verlo mirando fijamente a un área en frente de ella, no parecía haber nada extraño con él.
Esto es muy raro. ¿Por qué de repente me siento así?
Shi Yao no pudo evitar rascarse la parte de atrás de la cabeza mientras se preguntaba.
