—No lo sé. —Nian Xiaomu se mordió los labios y respondió.
Ella realmente no estaba segura.
A juzgar por la apariencia de esos vagabundos, así como por las mantas que habían estado en el patio, parecían haber permanecido en la residencia de la familia Tan durante un período de tiempo considerablemente largo.
Sin embargo, permanecer allí durante un largo período no era prueba refutable de que eran realmente vagabundos.
—Realmente eran vagabundos. —Yu Yuehan habló mientras jugueteaba con los pálidos y tiernos dedos de ella.
—No podemos juzgar a las personas sólo en base a la evidencia de su entorno, también debemos juzgarlas en su conjunto, por ejemplo, su apariencia, así como su forma de hablar. ¿Notaste la caja que había al lado de sus cobijas y que algunos de ellos intentaron protegerla cuando nos acercamos a ellos?