Al principio, ella había asumido que Yu Yuehan sabría que no estaba bromeando y que no era sencillamente que estuviera reaccionando de una manera ingeniosa al soltar esa declaración justo ahora. Por el contrario, ella había expresado la verdad durante una situación de desesperación.
Sin embargo, él no dijo nada incluso después de que ella hubiese esperado por un rato.
Ella perdió la calma y abrió los ojos para mirarlo.
Cuando ella captó la sonrisa amorosa que se expresaba también por medio de sus ojos, ¡se sorprendió al instante!
¿Podría haberse puesto tonto debido a toda la ira?
Sabía que ella fue la mujer que dio a luz a su hija en secreto, pero en realidad no estaba enojado y no se enfureció. Más bien, él sonrió...
Estaba sonriendo de una manera tan hermosa y encantadora.