Cuando Wen Yadai terminó su oración, todos los empleados que estaban en la sala de reuniones respiraron hondo.
Las miradas que le dirigieron a Nian Xiaomu estaban llenas de sospechas.
Nian Xiaomu observó muchas miradas. Ellos dudaban de ella. ¡Si ella no lograbaencontrar pruebas que demostraran su inocencia, no tendría la cara para continuar trabajando en la Corporación Yu, así Yu Yuehan no la despidiera hoy!
Wen Yadai se rio para sus adentros cuando vio la reacción de todos.
El peor sentimiento para alguien que era acusado falsamente de robo, no era la incapacidad para eliminar las sospechas.
El peor sentimiento para esa persona era tener que soportar las miradas críticas de las personas que la rodeaban.
Con estas miradas, ellos ya estaban mentalizados, pensando que eras el criminal. ¡En silencio e inmóviles, dichas miradas podrían llevar a alguien a la muerte!
¡Éste era exactamente el efecto que Wen Yadai quería lograr!
