La misma Nian Xiaomu se sobresaltó luegode que terminara de chillar.
Se sorprendió, por segunda vez, cuando levantó la cabeza y vio a Yu Yuehan, quien estaba de pie ante ella.
Un largo rato después, él finalmentemovió sus delgados labios y preguntó:—¿Qué dijiste hace un momento?
Nian Xiaomu: —...
¿Llegaría a tiempo si le dijera a él que, de hecho, ella no había dicho nada?
Ella recordó lo que había hecho justo en ese instante, gritándole directamente a su gran jefe e incluso expresando sus pensamientos de querer acercarse a él...
¿Qué debería hacer ahora?
¡Ella necesitaba una respuesta inmediata a esta situación de manera urgente!
