—Nos iremos inmediatamente. ¡Inmediatamente!
Ninguno de los reporteros se atrevió a preguntarle sobre lo que había sucedido en la sala antes. Después de que se apresuraran a eliminar las fotos en estado de confusión ¡se voltearon y huyeron!
Wen Yadai se puso de pie entre la multitud y rechinó sus dientes con fuerza al presenciar ésta escena.
Sin resignarse a que éste fuese el final, sus manos, que estaban a ambos lados de su cuerpo, se apretaron con furia.
Su plan estaba casi completo y sólo le quedaba el último paso.
¡Siempre y cuando los periodistas fuesen testigos de que Nian Xiaomu y Chen Zixin permanecieron solos en una habitación, nunca podrían borrar sus nombres!
¿Por qué? ¿Por qué apareció el Joven Amo Han?
Especialmente después de que ella le había permitido a los empleados del departamento que lo retuvieran en el comedor...
Wen Yadai no podía soportar la infelicidad y el rechazo dentro de ella.