Al verla mostrar una faceta obediente, las imágenes de los contenidos del diario aparecieron ante él.
Incluso en sus sueños, ella lo había amenazado con echarle una maldición de impotencia sobre su persona…
Si no fuera por el hecho de que ella hacía un gran esfuerzo por cuidar a Xiao Liuliu, ¡definitivamente él la hubiera estrangulado hasta la muerte!
No le permitiría presentarse ante él ahora, y por causa de ella…
Algo pasó por la mente de Yu Yuehan, quien repentinamente frunció el ceño.
Nian Xiaomu sintió un frío que atravesó toda su columna. Cuando coincidió con sus disgustados ojos, ella se preguntó cómo lo había ofendido.
¿A menos que haya pasado otra cosa anoche?
Seguramente podría ser porque había bebido algo, estaba tan entonada que no pudo contenerse y ¿tomó ventaja de la belleza de Yu Yuehan?
—Joven amo, Fang Zhenyi está aquí y desea verlo —le anunció el mayordomo respetuosamente, luego de ingresar hasta el comedor.
