Eso es cierto, la intención de Qin Mo no había sido pura, mientras que permitió a Fu Jiu estar dentro de la casa.
Aunque rendirse se le había pasado por la mente una vez, él todavía no podía definir los términos con ese incontrolablemente sentimiento, el cual tenía por los hombres.
Él se preguntaba cómo resultaría si el joven se enteraba de los pensamientos de él.
Justo en ese momento, el corazón de Qin Mo dejó de latir.
Sin embargo, estaba claro, por las recientes interacciones de ellos, que el joven no era gay.
En cambio, él podía estar usando a la persona gay para ocultar su identidad como un hacker.
Además, el joven trataba a las mujeres con calidez y cariño. Si Qin Mo no se aferraba a él en ese preciso momento, él podría nunca poder agarrarlo de nuevo.
Él nunca quiso experimentar eso, especialmente desde que la fiesta de disfraces terminó.
Él no podía soportar ver a alguien más besando al joven, sin importar el género.