Tenían que vigilar de cerca a ese chico. ¡Sino, "él" iba a coquetear en cualquier momento y lugar!
Los ojos de Qin Mo se enfriaron y el fondo de su mirada estaba nublado y sombrío. Nadie podía ver a través de esas gruesas nubes para saber qué escondía.
Pero el frío temperamento alrededor de él se volvió más obvio.
Fu Jiu no sabía que ese dios la estaba vigilando. Mordió la cuchara con los dientes blancos como la nieve y escribió con las manos vacías: —¿Bebé Feng, qué estás haciendo? ¿Por qué no contestas?
Al ver eso, incluso la expresión del rostro de Feng Shang cambió y al instante le mandó una captura de pantalla a Espada Z: —Mira, incluso el todopoderoso me llamó bebé Feng. Ídolo, ¿crees, crees que el Todopoderoso quizá esté enamorado de mí en secreto?
Qin Mo frunció el ceño ¡El mouse, que sostenía con la mano derecha, casi se rompe por lo fuerte que lo agarró!