Ese día estaba soleado, claro y sin nubes. Incluso en el valle de la Muerte del Dragón, el humo acumulado disminuyó y los rayos del sol brillaron inesperadamente en el valle.
Un macho adulto Hormiga Dragón yacía perezosamente en el césped a la entrada de la casa. "Es tan cómodo tomar el sol. ¡Oh, qué hermoso día!"
El macho adulto hormiga dragón miró hacia el cielo, mirando las hojas verdes sobre él. La luz del sol iluminaba las siluetas verdes sobre su cabeza con una suave brisa que soplaba. El clima ese día era demasiado agradable para ir a cazar.
En casa todavía había presas que ya había cazado desde el otro día, por lo que estaría bien tomarse un día libre.
"Shhh…" Se escuchó un susurro de fricción como si algo se acercara.
A la hormiga dragón no le importó. Desde que había sido promovido al nivel Superior, nunca se había preocupado por sus enemigos naturales.