Vestida con un vestido real negro, Sharron frunció sus labios sin sangre e inclinó la cabeza para mirar a Maric, asintiendo levemente.
Maric juntó las manos y dijo mientras ocultaba algo de su locura: —Tú sabes de la ruta Prisionero, ¿no?
—Sí, he oído hablar de eso en los círculos de Beyonder —respondió con franqueza.
«Por supuesto, esos círculos de Beyonder se refieren a los Halcones Nocturnos y al Club del Tarot...» Suspiró en su corazón mientras añadía.
Maric pareció recordar algo, y permaneció en silencio durante casi veinte segundos. Fuera de la ventana, podía escuchar el sonido rítmico de las ruedas del carruaje rodando por el pavimento de hormigón. Alborotó su desordenado cabello castaño y habló con una expresión ligeramente torcida en su rostro.
