—Tengo cero posibilidades. Ni siquiera estoy cerca de alcanzar la meta —dijo Cielodefuego Brillante al salir de las cadenas de esencia primordial.
—No te desilusiones por esto. Al menos nosotros te haremos compañía, ¿no es cierto? —dijo el príncipe Granalegría y se echó a reír.
—Vientoúnico es un Cultivador de la Fuerza del Corazón, ¿recuerdas? —envió Fuegoelevado mentalmente para consolarlo—. Norte Oscuro se unió a los Doce Palacios hace poco tiempo, pero se elevó rápidamente hasta convertirse en el segundo experto en nuestras pruebas. Su tasa de mejora es absolutamente ridícula. No es sorprendente que hayan podido lograrlo.
Cielodefuego asintió con la cabeza. Momentos después, el Príncipe Granalegría asintió también. Aunque era un hombre increíblemente orgulloso, tenía que admitir que la tasa de mejora de Ji Ning era increíble.
—Si caigo un paso atrás, siempre estaré detrás —dijo Fuegoelevado frunciendo el ceño.
