—¿Ni siquiera quedarán las palabras?
Xu Fang y los otros tres discípulos Zifu estaban tan furiosos que apretaron los dientes. Cuando miraron los caracteres en el pergamino de cuero, sintieron que la energía de la espada fluía hacia ellos y se habían asustado tanto que sus piernas temblaban. Comprendieron que estaban en un nivel demasiado bajo y que no poseían el nivel de comprensión que la energía de la espada dentro de los caracteres indicaba.
Sin embargo, si los miembros de alto nivel de Montaña del Dragón Nevado fueran a ver el pergamino, deberían ser capaces de deducir el nivel de fuerza de Ji Ning. Claramente, Ji Ning fue extremadamente cauteloso y no planeaba darles esa oportunidad.
—La carta del joven maestro ha sido entregada. ¡No me detendré!
El enviado del clan Ji partió ya que su trabajo ahí había terminado. En cuanto a Xu Fang y los otros miembros de Montaña del Dragón Nevado, solo podían mirar mientras el enviado se alejaba.
