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Los Cielos retumbaron cuando surgieron las Nubes de Tribulación rojas, como si hubiese un poderoso ejército marchando dentro de ellas. Se escucharon estruendos que sacudieron la tierra, llenando todo el Planeta Victoria Este.
El área comprendida por las Nubes se expandió más allá del planeta hacia el cielo estrellado. Eran inigualablemente grandes, y las mentes de los cultivadores de las sectas y clanes estaban llenas de algo parecido al estallido de un rayo mientras miraban.
En cuanto a los Palacios Inmortales, eran hermosos y ornamentados, emitían un poderío inmortal impactante que se elevaba hasta las estrellas. Además, parecía haber innumerables Inmortales flotando dentro de ellos.
Aunque eran ilusorios, era la primera vez desde la antigüedad que aparecían en la Novena Montaña y Mar. Incluso en las Nueve Montañas y Mares en general, una tribulación inmortal con palacios inmortales como ese era sólo materia de leyenda.