Ese movimiento final lo alzó diez metros... Y ahora, sólo quedaban diez respiraciones de tiempo hasta que la salida del Sol de la Ascensión Este terminara.
Ese movimiento final puso a Meng Hao a una altura de más de 450.000 metros. Había salido del Planeta Victoria del Este y entrado en el cielo estrellado.
En ese instante, sintió una indescriptible ola de luz y calor que se abatió sobre él. Parecía capaz de derretirlo hasta la nada en un instante. Al mismo tiempo, también vio el árbol amarillo en la Nube de Tribulación que repentinamente comenzó a dispararse hacia él.
Todas estas cosas sucedieron literalmente en un parpadeo.
En el momento en que hizo el último movimiento hacia el cielo estrellado, su Ídolo del Dharma se materializó detrás de él, y ya no medía 15.000 metros de altura ¡Sino 21.000 metros!
