El experto más poderoso de las Extensiones del Norte, el Jefe del Clan Sangre Imperial, miró a Meng Hao con los ojos muy abiertos. Antes, Meng Hao lo había estado acosando, pero ahora, la sensación que le daba era como la de una bestia salvaje primordial. Su mirada, su aura, la tempestad de color sangre, causaron que el Jefe del Clan se sintiera increíblemente conmocionado.
Su expresión era lúgubre mientras Meng Hao caminaba hacia delante con sus ojos brillando fríamente. Sólo le llevó un momento llegar al Jefe del Clan Sangre Imperial, tras lo cual agitó su mano, haciendo que se extendiera una luz de color rojo. En un abrir y cerrar de ojos, los dos habían intercambiado docenas de golpes.
Estampidos resonaron. Alrededor de ellos, fieros combates continuaron, y arriba, la batalla de los expertos en la cima de Búsqueda del Dao continuó.