El Nueveruinas Marchitainfierno era refinado de la sangre, carne y grasa de un verdadero Inmortal. Al congelar el profundo rencor que sentía en los momentos previos a la muerte, se formaba una poderosa maldición. Mientras no tocara ninguna tierra, su poder era ordinario. Sin embargo, una vez que tenía contacto, el poder de la maldición se desataría sobre todos los seres vivos que nacieron en esa tierra.
Sólo tenía un defecto fatal, o quizás sería más exacto decir una debilidad. Si bien era cierto que utilizaba el rencor refinado de la carne y la sangre de un verdadero Inmortal para maldecir la tierra, ésta no podía prolongarse por mucho tiempo. Como máximo, duraría tres meses antes de que la tierra se purificara naturalmente.