El Encantamiento de Separación de Almas permitía cultivar un alma que no podía morir. Una vez que esa alma aparecía, el ciclo de reencarnación en el Cielo y la Tierra no podía destruirla. Aunque alguien muriera, su carne y su sangre renacerían años después.
No era uno de los tres mil grandes Daos de la antigua Secta Demonio Inmortal, sino algo que Ke Yunhai había adquirido por casualidad y que se había convertido en un tesoro inestimable. Como no pudo cultivarla con éxito, se la pasó a Ke Jiusi.
Sin embargo, fue demasiado difícil para él, a pesar de su increíble talento latente. No pudo adquirir una iluminación completa; al final había necesitado el precioso tesoro que Ke Yunhai había forjado antes de su muerte, junto con los vastos cambios que Ke Jiusu experimentó, para poder comprenderlo y formar un alma imperecedera que el ciclo de reencarnación no podría destruir.