Si hubiese más expertos del Reino del Ancestro Marcial en una Secta Divina, su fuerza podría ascender por un nivel.
Sin embargo, para Nie Li, el Reino del Ancestro Marcial era solo la puerta de entrada para la cultivación.
Aún era demasiado pronto para entrar en la Tierra Santa Demoníaca Ancestral y enfrentarse al Emperador Sabio.
La razón por la que Nie Li dio tanta cantidad de elixires era, en primer lugar, para obtener beneficios para sí mismo. La otra razón, para aumentar la fuerza de esas Sectas Divinas. Después de todo, las Sectas Divinas eran las fuerzas principales que enfrentaron a la Tierra Santa Demoníaca Ancestral.
De todos modos, Nie Li podría producir esos elixires en grandes lotes.
—Me quedaré en la Secta Nota Celestial por un tiempo.
Nie Li miró hacia Ye Ziyun y Xiao Ning'er.
Tanto Ye Ziyun como Xiao Ning'er no pudieron evitar que sus rostros enrojecieran y cambiaran la dirección de sus miradas.