Al escuchar las palabras de Nangong Xianyin, Xiao Ning'er bajó la cabeza, indicios de tristeza se reflejaron en sus ojos.
Si Ye Ziyun era su prometida legítima, ¿qué pasa con ella?
Ella no es nada.
Desde el principio, ella no poseía ningún estatus. Sin embargo, ella ya había elegido a Nie Li en silencio. A pesar de saber que era imposible entre ella y Nie Li, ésta ya había decidido estar al lado de Nie Li.
Sea de vida o muerte.
Nie Li miró a Xiao Ning'er, que estaba de pie a su lado, y vio la mirada perdida y confusa reflejada en sus ojos.
Recordó su vida pasada, cuando Xiao Ning'er se sacrificó por él. En las dos vidas, ambos destinos estaban ligados entre sí y no podían separarse.
En ese entonces, había defraudado a mucha gente. Por lo tanto, en esta vida, ¡él protegerá a todos!
Nie Li levantó la cabeza, y reveló una leve sonrisa mientras respondía a Nangong Xianyin.
—Maestra de Secta Nangong, ella también es mi mujer.
