Situ Beiyan lanzó una mirada hacia la multitud. No sabía por qué Nie Li no estaba allí.
¿Era posible que Long Tianming hubiera utilizado algún método deshonesto para impedir que Nie Li asistiera?
De cualquier manera, la advertencia que este le había hecho acerca de Long Tianming lo había puesto en alerta. Estaba decidido a no dejar que Long Tianming se quedara con la posición de Maestro Interino de Secta Plumas Divinas.
Situ Beiyan gruñó con frialdad. Hizo un movimiento con la mano y un grupo de expertos cruzaron por el aire a toda velocidad y comenzaron a probar sus ataques sobre los hombres de Long Tianming.
—¿Quién crees que ganará? ¿Situ Beiyan o Long Tianming? —La multitud de discípulos discutía entre sí.
—¡Por supuesto que será el hermano Situ!
Situ Beiyan era el hijo del Maestro de la Secta. Sus fuerzas siempre habían presionado a las de Long Tianming; por eso todos tenían un mejor concepto de él.