—Si continúo usando el poder de la ley para refinar mi cuerpo, podría alcanzar un físico de rango Leyenda dentro de tres meses —pensó Nie Li internamente. Ya que el cuerpo físico era más fuerte, eso significaba que no tendría que preocuparse por proteger su vida. Al igual que Duan Jian, con su físico de dragón, ni una espada podría cortar su cuerpo.
Nie Li abrió los ojos, después de apagar sus sentidos para poder cultivarse durante un tiempo más.
Con respecto a la velocidad de cultivación de Nie Li, Yu Yan no tenía absolutamente ningún comentario que hacer. Su comprensión hacia el poder de la ley parecía ser incluso más alta que la de ella.
Yu Yan no podía soportarlo más y preguntó:
—Nie Li, ¿cuál es el método de reconstrucción del que hablaste antes?
Ya que Yu Yan finalmente estaba dispuesta a creer en él, sonrió y dijo: