Silencio.
Silencio sepulcral.
En toda la Arena de Combate Enjaulado no volaba ni una mosca.
Las miradas de todos se concentraban en un mismo lugar, la zona se asientos del ala sur.
En ese lugar, un anciano había caído sobre un charco de sangre y no tenía signos de vida.
—¿Qué está sucediendo? Muchas personas no habían visto con claridad lo sucedido.
Solo algunos espectadores en el ala sur sabían cómo se habían dado las cosas.
—Hiic, hiic —un cuerpo dorado llegó lentamente al hombro de Duan Ling Tian.
¡Era precisamente la ratoncita dorada!
Ahora mismo, la ratoncita dorada sostenía una espada espiritual de bolsillo en su mano y de ella caía gota tras gota de sangre, brillante y resplandeciente.
¡Oh! ¡Oh! ¡Oh! ¡Oh! ¡Oh!
...
La multitud de espectadores en el área sur no pudo evitar su gesto de asombro.
¿La que había atacado y matado al anciano recién había sido esta ratoncita dorada?